LA MUJER ASIÁTICA COMO ESPOSA DOMINANTE
Asia entera está llena de mujeres, estrictas y dominantes, que andan buscando hombres a los que domar y convertir en sus sumisos. Y lo cierto es que son muchos los hombres que desearían poder obedecer y servir a una asiática, pues les parece que las mujeres de ese continente son las más estrictas y dominantes. Incluso existe una creencia, bastante generalizada, de que solo una asiática sabe, realmente, como domar y disciplinar a un hombre. Y es que, en cuestión de disciplina, las mujeres asiáticas emplean los castigos más brutales y severos, para conseguir tener enseguida al hombre bien domado y obediente.
Y son muchos los hombres que, desde todas las partes del mundo, viajan a Asia en busca de una estricta esposa asiática. Tailandia y las Filipinas son dos de los países más populares entre los hombres que buscan una esposa dominante. Otro país en el que están surgiendo muchas mujeres dominantes es China.
Son muchos los hombres que creen que las mujeres asiáticas se cabrean enseguida. De hecho, si que parece que las asiáticas se enfadan con facilidad con el hombre con el que se relacionan. Así que, si estás casado con una asiática, es importante que le seas muy obediente, o enseguida averiguarás lo muy deprisa que puede cabrearse tu esposa.
Y si tu esposa asiática se cabrea contigo, te lo hará saber al momento, y te exigirá que hagas algo para hacerla sentirse feliz de nuevo. Puede que tu esposa asiática emplee en ti la disciplina física o verbal, para enseñarte a serle obediente. Puede que use la humillación verbal, o el facesitting, o el abofetearte, un castigo con el látigo, una azotaina sobre sus rodillas, darte con la caña, o algo más.
A muchas asiáticas les encanta entrenar a sus esposos para que les sirvan como chacha travesti en la casa: pueden forzar a sus maridos a vestirse con un uniforme de criada sexy, mientras les sirve las comidas o hace las tareas del hogar. Aunque hay algunas esposas asiáticas, especialmente humilladoras, que prefieren tener a sus esposos totalmente desnudos mientras andan por casa.
Y ten por seguro que tu dominante esposa asiática se hará con el control de lo que pasa en la alcoba: te domará, para que en la cama hagas, exactamente, lo que ella desee. Y no le va a importar un pimiento cuales son tus necesidades sexuales, ya que todo girará en derredor de lo que ella quiere en la cama. Algunas esposas asiáticas incluso tienen a su esposo controlado con un aparato de castidad y se buscan los amantes que les placen. Y quizá te dome para que seas un esposo cornudo, que hace de palanganero para esos amantes.
Para los hombres que ya son sumisos, o quieren aprender a serlo, una esposa asiática es lo ideal. Y cuanto más estricta y dominante sea tu futura esposa asiática, mejor para ti como sumiso que eres. Al principio de vuestra relación, se honesto acerca de tu necesidad de obedecer y servir a una estricta y dominante esposa asiática. Te sorprenderá lo contenta que se pone esa persona al saber que eres un sumiso que busca una estricta y dominante esposa asiática.
Pero hay diferencias entre las diferentes mujeres asiáticas, aunque todas ellas sean estrictas y dominantes…
Las mujeres chinas son unas expertas en lo referente a controlar su matrimonio: saben como mantener a su marido bajo un estricto control y son ellas las que toman todas las decisiones. Una mujer china también querrá, y sabrá, controlar las finanzas familiares. A las mujeres chinas les encanta dominar, no sólo a los hombres sumisos, sino también a los dominantes (que convierten en sumisos). Y una mujer china espera que su hombre tenga éxito en la vida: esperan que su marido sumiso trabaje duro y le entregue todas sus ganancias, sin quedarse un céntimo. La mujer china llega incluso a controlar la ropa que viste su marido… y lo que come. También controla con quien le está permitido hablar, y el tipo de coche que conduce. Las esposas chinas son mandonas y les encanta tener un marido obediente.
Las esposas chinas pueden utilizar tanto la disciplina verbal como la física para controlar a su hombre y, a veces, pueden ser muy sádicas en el modo en que lo disciplinan. Como sumiso puedes esperar que todas y cada una de las partes de tu vida sean controladas por tu mandona esposa china. Y una esposa china, estricta y dominante, controlará a su marido siempre, tanto en público como en privado. Tanto así que, a menudo, la esposa china establece una serie de señales, por ejemplo con las manos, para poder darle órdenes en público a su marido, y controlarlo sin que nadie se de cuenta.
Resumiendo, la mujer china mandona es muy precisa y detallada en el modo en que entrena a su hombre, para que le obedezca y le sirva. De hecho, son muchos los hombres que creen que la mujer china es la mejor, cuando se trata de domar a un sumiso.
Y pasemos a las Islas Filipinas: muchos hombres que se casan con una filipina creen que se han casado con una esposa sumisa. Ese es uno de los mayores mitos que hay sobre las mujeres de las Filipinas… ¡y está totalmente errado! Lo cierto es que las filipinas son unas esposas muy estrictas. Pregúntaselo a cualquier hombre que se haya casado con una filipina, y te dirá lo estricta y mandona que es su mujer en su matrimonio.
Cierto es que muchas filipinas no se muestran dominantes al inicio de una relación con un hombre… pero a medida que se va desarrollando esa relación empiezan a mostrar, poco a poco, su verdadera naturaleza dominante. Las mujeres filipinas acostumbran a mostrarse muy pacientes en el modo lento en que dominan a su compañero… pero, no te equivoques: una vez casada, la esposa filipina aplicará su dominación, con toda su dureza, sobre su marido.
Las esposas filipinas tienen fama de tener muy poco aguante: si no están contentas con algo se lo harán saber de inmediato a su marido, esperando que se apresure en remediarlo, para contentarlas de nuevo.
Por lo general, una esposa filipina estricta usará sobre todo la disciplina verbal para entrenar a su esposo en la obediencia. Y, si tienen que disciplinarlo físicamente, son muchas las esposas filipinas que solo lo hacen en privado… aunque también las hay que no dudan en disciplinarlos en lugares públicos.
Después de casarse con una filipina, la mayoría de los hombres aprenden enseguida a ser un marido muy sumiso y obediente a su esposa filipina. Y la verdad es que la mayoría de ellos no dudan en decir lo muy felices que son en su matrimonio, por el mismo hecho de servir y obedecer. Y cuando esos hombres les cuentan a sus amigos lo estricta que es su esposa filipina y lo felices que eso les hace, a menudo provocan que algunos de esos amigos también busquen a una mujer filipina con la que casarse.
Y, para terminar, hablemos de las mujeres tailandesas: son muchos los hombres que están convencidos de que las tailandesas son muy mandonas y dominantes en sus relaciones. Y bastantes de ellos viajan a Tailandia en busca de una mujer tailandesa dominante para casarse con ella. Esos hombres ya son sumisos, y por eso andan en busca de una mujer tailandesa estricta a la que poder servir y obedecer.
Y la verdad es que cuando un hombre sumiso se casa con una tailandesa está destinado a toda una vida de servirla y obedecerla. Su esposa tailandesa le domará, entrenándolo para que realice todas las tareas del hogar, como la limpieza y el preparar y servir las comidas, el hacer sus recados, y el entregarle a ella la totalidad del sueldo que gana. Además, a las mujeres tailandesas dominantes les encanta ponerles los cuernos a sus maridos sumisos. Así que, si estás interesado en casarte con una estricta mujer tailandesa, prepárate a servirla como cornudo: a menudo te mantendrá en castidad poniéndote uno de los aparatos para controlar la polla, mientras ella se lo pasa en grande follando con sus amantes. Y espera tener que pasar largos periodos de tiempo sin sexo, pues a ella le va a encantar saber que tú sufres tu castidad, mientras ella tiene sexo a tope con otros hombres.
Para aquellos hombres que anhelan el rol del esposo sumiso la mujer tailandesa es ideal como esposa controladora. Y ciertamente a la mujer dominante tailandesa le encanta administrarle un castigo corporal severo al sumiso que cae en sus manos, para domarlo y entrenarle en como debe de obedecerla y servirla. Los esposos sumisos de una mujer tailandesa pueden esperar una dura disciplina para pagar cualquier error que cometan, o por no ser lo bastante obedientes.
Si estás interesado en casarte con una mujer tailandesa para que te domine en el matrimonio, debes de empezar por decirle que eres un sumiso, y que estás deseoso de aprender a servirla y obedecerla. Hay muchas mujeres tailandesas que andan buscando un esposo obediente, y hay muchas páginas de citas en las que se pueden contactar a tailandesas dominantes. Pero sé honesto con ella y dile que lo que quieres es una esposa muy estricta y dominante, y que estás dispuesto a empezar a aprender los modos y maneras en que obedecerla y servirla. Las mujeres tailandesas son expertas en la doma de hombres, así que puedes estar seguro de que, a sus manos, recibirás el mejor entrenamiento para tu futura vida como esposo sumiso.
Así sea.
Hallado en Internet, en la página australiana Domina-List.