Cuando te puede el afán de superación.

Cuando sientes Su exigencia, Su demanda, Su deseo, Su apoyo constante.

Cuando deseas darle todo de ti.

Cuando buscas la excelencia que Lord MC merece, con el fin de verle complacido.

Cuando trabajas en ello y luchas con todas tus fuerzas contra esos miedos y fantasmas sin sentido que a veces asoman, pero con Su ayuda desaparecen rápidamente.

Cuando te das cuenta de que puedes aunque pensabas que no.

Cuando te encuentras llorando pero al mismo tiempo no quieres detenerlo porque estás disfrutando, sabes que Él también y eso es lo único que tienes en mente en ese momento.

Cuando te aferras a Su mano en cada pequeño paso adelante. Esa mano que siempre cree en ti y te anima a avanzar.

Cuando sientes ese orgullo de ti misma.

Cuando a pesar de no verlo, sientes el orgullo y la satisfacción en Sus ojos… y eso es lo que buscas, te importa más que tu propio orgullo y tu propia satisfacción.

Entonces, es cuando tu mente está en paz, calmada y asoma una sonrisa en tus labios al mismo tiempo que todo cobra sentido… estás exactamente donde deseas estar, sin rechistar, sin dudas, feliz, a Su disposición, en tu lugar, a Sus pies, para lo que Lord MC desee…